Este titulo reúne los dos elementos que hicieron de la noche un poquitin extraña. Estábamos volviendo de cenar con los chicos, cuando en la puerta de un cyber, las chicas se detuvieron a ver un gato calipso, de tres colores, que tenia la cara dividida bien simétricamente. Tanto las impresiono que Pablo le saco una foto con el celular. Al llegar a la casa de Mina, Pablo vio el dibujo del gato de ella, Adolfo, pegado en la heladera. Pablo no pudo dejar de notar que era muy parecido al gato de la foto, aunque Adolfo y ese son de razas distintas. Esto paso como un comentario y murió ahí.
Volviendo para casa, luego de acompañar a Pablo a su colectivo, iba escuchando la música de Spiderman 2. Pare en un quiosco y el chico que me atendió, tenia una remera de esa película. Dos pequeñas casualidades sin relación, excepto la frase que se me ocurrió yendo a casa, luego de salir del quiosco, la que puse como titulo. Es solo una pequeña rareza, aquí en el país de Jauja de Ichinén.
Han entrado en la dimensión desconocida de Ichinén....
No hay comentarios.:
Publicar un comentario