marzo 15, 2006

El telefono del infierno.

Hoy que fui al proveedor de libros, la llame a Leticia para consultarle sobre algo. Justo vi que en mi lista de contactos figuraba uno que ya le habíamos entregado su libro, era un “Ángeles y demonios”. Cuando llamo y me responden, pregunto “Leti? Leticia?” me responden, que esta equivocado. Era una voz de mujer, pero estaba seguro que no era la de Leticia. Volví a llamar y ahí si me responde Leticia, me pregunta si yo había llamado recién. Por que había llamado recién uno que le había dicho “Ángeles?”, pero que estaba segura que no era mi voz. Yo me quede pensando… Estaré tan loco que digo una cosa y creo que digo otra? Me salio Ángeles en vez de Leticia? O se habrán cruzado las llamadas? Que justo que era tal nombre con tal otro! Demasiado ya seria, pero bien puede ser que el efecto de la dimensión desconocida, este teniendo efectos sobre mi mente y me haga decir boludeces. Todo es posible en esta dimensión!

P.S: El teléfono del infierno siguió haciendo de las suyas en sus días siguientes. Una mañana me suena a eso de las 11 estando en el parque, cuando miro quien llama. Descubro que es la persona que tengo al lado. Se había marcado solo como me paso aquella vez a mí, la misma en que comencé a sospechar que traje este teléfono del infierno, de mi última estadía por allí. No atendí el teléfono y le avise a la dueña del teléfono, mostrándole el mío. Fue una situación que me dejo por unos segundos demasiado anonadado como culo en palangana, creyendo que había entrado en lo más profundo de la dimensión desconocida. Si ella estaba a dos metros, con el teléfono colgado al cuello, quien llamaba? UHHHHH, tengo miedo nene. Esto esta cada día mas freakie.
Y en otro orden de cosas, algo que no seria extraño pero que si me dejo helado en serio. Esta misma noche, un amiga me llama a este maldito teléfono y me dice que otra amiga en común esta internada. La misma que me decía que no fumara que si no, nos veríamos en el Durand a fin de año. Y donde esta internada esta chica? En el hospital naval, a escasas cinco cuadras del Durand. Esto si es muy fuerte! Da miedo en serio, luego recordé que había hablado con ella la semana anterior y me comentaba que andaba con dolores de cabeza, temiendo una migraña. Temo por ella, pero también temo por todos nosotros, esto ya dejo de ser gracioso!
Han entrado en la dimension desconocida de Ichinén...

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