Esto viene un poco con delay, debido a otras ocupaciones. Hace unos días, cuando me trajeron el Seikyo el canillita me comentó sobre mi remera, la del festival Soka 2010. A la tarde, me fuí a la distribuidora a comprar libros, allí había uno de los muchachos que atienden que es de otro local pero cubría ese día justamente en el que llegué yo. El pibe me comenta también sobre mi remera y resulto ser budista también. Esto me demuestra que el futuro va por aquí, como dice la vieja metáfora budista, que es como el agua y se amolda al recipiente que la contiene. Nos estamos esparciendo como el agua, lenta pero inexorablemente.
Han entrado en la dimensión desconocida de Ichinén....